Desde el 25 de noviembre inició el programa para regularizar y reubicar a los inmigrantes haitianos que están varados en Tapachula, los cuales serán trasladados a 10 estados de la República, donde se les dará empleo y esperarán una solución a su estatus migratorio, informó el embajador de Haití en México, Hugues Momplaisir Féquière. El diplomático informó que la embajada de Haití está haciendo acuerdos con varios estados de la República Mexicana para buscar empleos para sus ciudadanos. Entre las entidades a donde serán trasladados a partir de hoy (25 de noviembre) están Puebla, Querétaro, Hidalgo, Estado de México, Guanajuato, Sonora, Colima y Jalisco.
“Si bien no cumplen como refugiados, tampoco se les puede retornar a su país de origen por la situación caótica que se vive: colapsó el parlamento, hubo un terremoto, un huracán. Sería de lo más inhumano mandar a estas personas a Haití”, declaró Andrés Ramírez, coordinador general de la Comisión General de Ayuda a Refugiados, el martes en Tijuana.
La llegada de los migrantes haitianos será un suceso nuevo para los colimenses. Los medios ni el Gobierno de México ni el gobierno de Colima han dado información de cuántos serán los migrantes que llegarán a Colima, pero en Tapachula se encuentra entre 30 y 45 mil migrantes en espera que alguien les tienda la mano. No se sabe el número de migrantes que llegarán a Colima. Lo cierto es que no serán muchos –ni se conoce con certeza su llegada–, pues Colima tiene una economía muy pequeña.
Ojalá que los políticos de derecha no empiecen con sus actitudes y conductas xenofóbicas. En Colima no estamos en la abundancia precisamente, pero debemos tener sensibilidad y empatía con estos hermanos caribeños que hoy necesitan de nosotros.
En Colima sabemos de temblores y terremotos. Sabemos lo que es quedarse sin casa. Hemos sido solidarios entre nosotros y también hemos recibido ayuda y solidaridad de nuestros hermanos mexicanos y de otros países.
En Colima sabemos de ciclones y huracanes. Vivimos en tierra de ciclones y huracanes.
En Colima sabemos de erupciones. Pues tenemos un hermoso volcán de fuego adornando nuestro paisaje. A veces la belleza cuesta.
Haití colapsó como país. Esta gente no tiene país a donde regresar. Debemos ayudarlos. No será fácil, pero debemos tenderles la mano a los que lleguen a nuestra tierra por causas ajenas a su voluntad.
Yo espero que los conservadores no empiecen con su discurso de odio contra los migrantes y de propaganda política ajena a lo humano.
La llegada de los inmigrantes nos costará, sin duda, pero los mexicanos sabemos que donde come uno comen dos. Más agua a los frijoles y sigue la vida.
La próxima llegada de migrantes es una buena oportunidad para demostrar que, a pesar de nuestras carencias, somos humanos… y ayudarlos nos hace mucho más humanos y mejores.
Démosles la mano franca a los migrantes. Ellos no tienen país y merecen una nueva oportunidad sobre la tierra.
Bienvenidos haitianos. Colima es un estado noble, habitado por gente buena y muy humana. Es hora de tenderles la mano como lo han hecho con nosotros otra gente cuando lo hemos necesitado.
Tengamos presente que lo humano nos une. El odio nos separa. Los haitianos traen una cultura rica y distinta que, mucho nos puede enseñar, recibámosla con los brazos abiertos.