De acuerdo al Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, los gobiernos estatales que solicitaron un crédito bancario para hacer frente a las necesidades financieras de la contingencia sanitaria por Covid-19, «se equivocaron, cometieron un error».
Por el contrario, López Obrador resaltó que el Gobierno Federal ha reafirmado el propósito de evitar un endeudamiento, como lo había manifestado desde el inicio de la pandemia; por lo que en comparación con otros países, en México no se verá un aumento significativo en la deuda.
«Lo único que se aumenta es lo que se tiene que considerar por la caída de la economía (mundial) y por la depreciación del peso que por cierto no ha sido mucha (…)».
El pasado miércoles 19 de agosto, López Obrador sostuvo un encuentro con la Comisión Nacional de Gobernadores (Conago), en el que los mandatarios estatales que integran la Alianza Federalista, hicieron una petición para acceder a mayor presupuesto para las administraciones estatales.
Al calificar como una «muy buena reunión», el Presidente aseguró que el Gobierno Federal continúa apoyando a las administraciones estatales, toda vez que el presupuesto de la Federación se envía de manera puntual.
«No les debemos nada, ellos reciben mes con mes su cheque de lo que por ley les corresponde y esas participaciones federales han ido creciendo», enfatizó el mandatario federal.
Sin embargo reiteró que es inviable que la Federación aporte más recursos a las entidades federativas.
«(…) La Federación tiene que responder por compromisos adquiridos, hay que pagar la enorme deuda que dejaron los gobiernos anteriores”, explicó López Obrador.
En este sentido, explicó que para atender el tema de la deuda se necesitan recursos por 700 mmdp cada año que cubren intereses, esto, aunado a recursos por 800 mmdp para el pago de pensiones.
Cabe destacar que el pasado mes de julio, el gobernador de Colima, José Ignacio Peralta Sánchez, -quien es miembro de los 8 gobernadores de la Alianza Federalista- solicitó un crédito a largo plazo por 740 millones de pesos que se destinarían a tres rubros: salud, seguridad y la rehabilitación del Palacio de Gobierno.
