La resolución del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación le dijo no al partido de Felipe Borolas Calderón y revivió a Redes Sociales Progresistas y a Fuerza Social por México.
La sentencia es trascendente porque, por un lado, es un no a la narcopolítica y, por otro, es un atisbo de que la vida política en México tiene remedio y que los partidos político pueden tener una segunda oportunidad.
Haberle negado el registro a México Libre, es un no a la narcopolitica, significa el haberle cerrado la puerta a la corrupción promovida por los Calderón-Zavala y sus alianzas con el narcopoder: violento, asesino y corruptor.
Es abrirle la puerta, con base en el principio del derecho de los ciudadanos a organizarse, a los partidos Redes Sociales Progresistas y a Fuerza Social por México que, están recibiendo una segunda oportunidad, para actuar en la vida política nacional, yo presumo, con cierta dosis de redimición.
La negación del registro a México Libre es cerrarle el paso a la narcopolítica y a los políticos corruptos que impulsan esta tendencia que tiene a México en una situación de violencia inédita. El no a México Libre es el principio del fin de la dupla Calderón-Zavala. Los cuatro magistrados que votaron a favor de negarle el registro fueron: Felipe de la Mata Pizaña, Mónica Soto, José Luis Vargas y el magistrado presidente Felipe Fuentes. Mientras que Indalfer Infante, Janine Otálora y Reyes Rodríguez Mondragón se pronunciaron en contra de negarles el registro. Tenemos que la votación fue muy cerrada: 4 a 3. Esto significa que la visión corrupta todavía tiene mucha fuerza entre los magistrados electorales. Y la amenaza de la corrupción, en los procesos electorales, está latente.
Sin embargo, no deja de ser un anuncio-advertencia para que el PRI y el PAN, pues, en cuanto se pongan en marcha los diversos procesos, sustentados con la información de Emilio Lozoya, el PRIAN debe poner sus barbas a remojar, pues sus registros estarán en entredicho. La detención del ex secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda, es una muestra más del narcogobierno que Fox, Calderón y Peña Nieto crearon y, particularmente para Colima, significa que se dará luz a los opacos proceso de construcción de las nuevas instalaciones militares en Loma de Fátima y el caso de los 200 millones del préstamo de Banobras.
Para las próximas elecciones, llamadas intermedias, la postura de los partidos del Trabajo, Verde, Encuentro Solidario y Panal tienen que redefinirse porque, hasta ahora, parece que los partidos del Trabajo, Encuentro Solidario y Verde no quieren acompañar más al presidente en su tarea de separar el poder político del poder económico. Su dilema será: o continúan apoyando el programa transformador y anticorrupción o se bajan y se unen a la oposición que lo pretende frenar, en el mejor de los casos, pero incluso revertirlo, en el peor de los escenarios. Ellos decidirán. Al parecer van con Morena pero sus intenciones ya no son tan claras. Huelen a traición y a oportunismo
El registro de Redes Sociales Progresistas y Fuerza Social por México amplía el espectro para Morena y el futuro impulso de candidaturas comunes, y así, para ampliar la base social del proyecto obradorista de nación. RSP y Fuerza Social por México no podrá coaligarse con Morena, por mandato de ley, en las elecciones de 2021, pero actuar sí, de facto, en el impulso de ciertas candidaturas y preparar su terreno para el 2024, cuando sí podrán ir coaligados.
La agenda política para Colima tiene dos puntos, de entrada, que los partidos tienen que definir con mucha claridad para que los electores decidan sin sombra de dudas. Punto uno.- El ex gobernador Mario Anguiano Moreno debe resarcir el daño causado al erario del gobierno de Colima. Punto dos.- El gobernador Nacho Peralta Sánchez –ya entonces será ex gobernador- deberá ser investigado y enjuiciado por el crédito de 200 millones que otorgó Banobras, y que, actualmente está “perdido” y, sus maniobras presuntamente corruptas -con prestigiados empresarios del puerto- que realizó en la aduana de Manzanillo y que la DEA norteamericana está poniendo bastante atención. En síntesis, enjuiciar a Mario Anguiano y a Nacho Peralta.
No está demás precisar que los actuales miembros del PRI, PAN, Movimiento Ciudadano, del Trabajo, Panal y Encuentro Solidario ya decidieron apoyar la corrupción. Actualmente, en el Congreso, estos diputados basura decidieron no molestar a Nacho Peralta ni con el pétalo de una pregunta incomoda que hasta han decidido no citarlo a comparecer para que éste explique el desastre de gobierno que encabeza. De qué tamaño será el soborno para que estos mequetrefes (disfrazados de diputados) tomen este tipo de acciones. Ellos solapando a Nacho y la DEA norteamericana le siguen los pasos de cerca.
Esos dos puntos serán ineludibles de los partidos y marcarán el debate de la futura contienda electoral en Colima. Que la síntesis integral es: defensores de la corrupción versus luchadores contra la corrupción. Que con nombres sería: PRIAN, Movimiento Ciudadano, Panal, Verde, Encuentro Solidario y PT contra Morena.
Con el registro de los nuevos partidos el escenario cambia en Colima y, tanto, Redes Sociales Progresistas y Fuerza Social por México tiene la urgente necesidad de definirse con que bando están o buscan el cambio del gobierno o están a favor de la corrupción. Más temprano que tarde tendrán que hacerlo.
RSP y Fuerza Social vienen a ocupar los espacios locales dejados por el PT, Verde y Panal. Es de domino público que ambos partidos políticos son afines a López Obrador y, también es cierto, que ante la fuerte embestida de la derecha y sus medios masivos de comunicación el presidente precisa de ampliar su base social. Entonces, no cabe duda que estas dos fuerzas políticas vendrán a darle un nuevo aire a la contienda.
En el contexto actual, nacional y local, los ciudadanos acusan un amplio hartazgo por la creación de nuevos partidos. Sobre todo porque los ciudadanos no quieren que estos sigan desangrando el erario. Si optan por apoyar la corrupción su destino será el fracaso. Si buscan cambiar y combatir la corrupción serán bien recibidos.
Para mí, no cabe duda, que estos nuevos partidos sustituirán a los oportunistas y vividores partidos del Trabajo, Verde, Panal y Encuentro Solidario.
México libre, no pudo ser, porque sus dirigentes son narcopolíticos. Redes Sociales Progresistas y Fuerza Social por México serán partido verdaderos, si y sólo si, reivindican la lucha contra la corrupción. Si optan por más de los mismo y luchan por el poder y nada más el poder estarán naciendo muertos. Ellos tienen la palabra.
