“El mal y el malo según Héctor Beloascarán y Elías Contreras: Y entonces dijo que ahí había de todo, que sea represión, asesinatos, cárceles, perseguidos, desaparecidos, fraudes, robos, despojos de tierras, venta de la soberanía nacional, traición a la patria, corrupción.
En resumen, dijo los de arriba chingando a los de abajo. Y entonces yo me quedé pensando y prendí mi cigarro ‘ingrato’ y me sonreí y dije El mal.” Los muertos incómodos (falta lo que falta), subcomandante Marcos, Paco Ignacio Taibo ll.
Estamos ya a tan sólo un par de semanas de un ejercicio democrático inédito en la historia de nuestro país: La Consulta Popular del 1 de agosto sobre el juicio a expresidentes y altos mandatarios por posibles crímenes y delitos cometidos durante sus periodos de gobierno neoliberal. La consulta está siendo impulsada con mucho esfuerzo por parte de diferentes organizaciones políticas de izquierda y también de la sociedad civil, las bases militantes y simpatizantes de nuestro partido-movimiento nos hemos sumado con ímpetu a este ejercicio democrático.
Y hoy, saludo con enorme alegría al Ejército Zapatista de Liberación Nacional, expresión revolucionaria de la lucha contra la injusticia en nuestro país y en América Latina, que ha decidido sumarse a la causa democrática y popular de la Consulta sobre juicio a expresidentes. Saludo con fraternidad este gesto, y me entusiasma porque es muestra de que las diferentes expresiones de la izquierda pueden sumar esfuerzos y confluir estratégicamente así sea de forma coyuntural, para la consecución de objetivos comunes. Podemos tener diferentes formas de entender la lucha política, diferentes maneras de concebir los caminos estratégicos, pero compartimos el horizonte de un mundo mejor, en donde quepamos todas y todos.
La Consulta Popular es una oportunidad histórica para tomar las plazas públicas, para defender la memoria frente al olvido, para defender lo público frente a la tendencia privatizadora que lo mercantiliza todo. La Consulta Popular es una oportunidad histórica para construir poder popular, para encontrarnos en las calles y dialogar con nuestros vecinos sobre el país que queremos.
La Consulta Popular del 1 de agosto es un invaluable ejercicio de cultura democrática y de articulación de masas, es un poderoso ejercicio pedagógico que nos puede llevar a ensayar la organización popular de masas a nivel nacional, a ensayar las posibilidades de un republicanismo democrático que no se limite a votar cada seis años, sino que exija que se someta a consideración del pueblo soberano la conducción del país que queremos construir las mayorías.
También es una consulta que rescata la memoria histórica de nuestros pueblos, las resistencias al despojo y al saqueo neoliberal, que recuerda la dignidad de las y los que lucharon, que mantienen vivo su recuerdo, su dignidad frente los crímenes que cometieron los que se creían amos y señores de nuestro país, esa dignidad que ahora podrá ser expresada, en un anhelo de justicia frente a la ignominia de un pasado hacia al que no queremos volver, pero estamos seguros tampoco queremos olvidar.
Por eso, como expresa el comunicado del EZLN desplegado el día de hoy que saludo fraternalmente: «Hay que entrarle [a la Consulta Popular], no viendo hacia arriba, sino mirando a las víctimas. (…) [por] el derecho a la verdad y la justicia de quienes han sido víctimas por acciones y omisiones del Estado Mexicano».
Nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador ya hizo un llamado a las y los mexicanos para participar en esta consulta histórica, del que dijo, es “un procedimiento inédito, democrático, que tiene mucha fortaleza política y sobre todo moral; no es un asunto sólo jurídico, es condenar a malos gobiernos y ayudar a la no repetición”.
Así que, ese llamado lo replicamos para convocar a todas y todos a que acudamos este 1 de agosto a las urnas, que estemos por encima de las intenciones del INE de obstaculizar la participación popular, que salgamos a ejercer este derecho y que seamos parte de este momento histórico. ¡La consulta va!