Gobernación ve a Colima inestable; homicidios, en máximos
El subsecretario de Gobernación Ricardo Peralta Saucedo afirmó que el secuestro y asesinato de la diputada local Anel Bueno y el homicidio de 7 policías "derramaron la gota"
El subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación (Segob), Ricardo Peralta Saucedo, advirtió que en Colima se vive una situación de inestabilidad, debido a que desde hace años se mantiene una pelea por el control de negocios del crimen organizado, así como los secuestros y asesinatos de siete policías de la entidad y una diputada local, esta semana.
“Colima es una entidad que tiene varias particularidades y tiene el Puerto de Manzanillo que puede competir con Lázaro Cárdenas, pero tiene una gran actividad minera, que ha tenido la intervención de grupos delincuenciales que buscan el control de diversas actividades económicas. Esto ya tiene varios años, pero el secuestro y rapto de la diputada local derramó la gota, aparte de encontrar cadáveres de policías; es una situación inestable”, dijo el subsecretario de Gobernación.
En una nota publicada el día de hoy por La Razón, el funcionario federal afirmó que el secuestro y posterior asesinato de la diputada Anel Bueno y el homicidio de 7 policías estatales dejan ver la inestabilidad que se vive en la entidad.
“El secuestro y rapto de la diputada local derramó la gota, aparte de encontrar cadáveres de policías; es una situación inestable”.
El subsecretario detalló que el Gobierno federal ha tenido contacto con el gobernador de la entidad, José Ignacio Peralta, pues la situación que prevalece en la entidad es parte de la descomposición del país “y hoy estamos encontrándonos con las diversas realidades que se han tenido por décadas por la ausencia de gobiernos”.
“Estamos esperando respuestas también del gobernador”, aseveró el funcionario, quien remarcó que la resolución de esos problemas es competencia de la administración estatal.
Asimismo, detalló que atender las causas, lo cual es el enfoque del Gobierno federal en el combate a la inseguridad, así como reforzar la educación, salud, entre otros rubros, “se debió haber hecho hace décadas” en el estado.
La nota refiere que de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), la entidad que gobierna José Ignacio Peralta Sánchez es la que tiene la tasa más alta de asesinatos con respecto a su población en el primer tercio del año, con una incidencia de 27.51 homicidios por cada 100 mil habitantes, casi cuatro veces más que el promedio nacional, que actualmente es de 7.63.
En tan sólo cuatro meses de este año han sido asesinadas 251 personas en el estado; es decir, 9.13 por ciento más que los 230 que se contabilizaban en el mismo periodo de 2019.
Pero, además, desde 2016, año en el que inició la administración de Peralta Sánchez, el estado encabeza ininterrumpidamente la estadística de asesinatos por cada 100 mil personas.
En 2015, la entidad reportaba 22.45 homicidios por cada 100 mil habitantes; sin embargo, para 2016 (Peralta inició su gobierno en febrero) esta cifra se disparó 204.3 por ciento para llegar a 68.33, con lo que tomó la cabeza a nivel nacional.
Un año después, el delito aumentó 36 por ciento, para llegar a 93.37 casos. Aunque en 2018 y 2019 presentó una baja a 81.02 y 85.40 ejecuciones, respectivamente, nunca ha dejado de estar en el primer lugar en la estadística.
Al respecto, Javier Oliva Posada, especialista en seguridad, advirtió que Colima tiene una prolongada historia de violencia, pues “no obstante que es un estado geográficamente pequeño con respecto a las demás entidades, concentra una desafortunada actividad criminal”.
El investigador consideró que una forma efectiva de inhibir esto es la intervención de un cuerpo federal, como la Guardia Nacional, y advirtió una falta de reacción; “si en otro país, ocurriera lo de los siete policías sería una crisis política nacional”, aseveró.