Familiares de mineros de Pasta de Conchos y AMLO firman acuerdo para rescate de cuerpos
La secretaria de Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde Luján, presentó los acuerdos que establecieron los familiares de los mineros de Pasta de Conchos con el presidente Andrés Manuel López Obrador, cuya parte central será el rescate de los cuerpos a cargo de la Comisión Federal de Electricidad.
En su cuenta de Twitter, la titular del trabajo presentó la Minuta que se desprende de la reunión que sostuvieron este lunes 14 de septiembre con el Ejecutivo federal, en donde destaca que “las partes acuerdan iniciar de inmediato con el proceso de rescate, a través de la Comisión Federal de Electricidad. Las familias otorgan el consentimiento para que la CFE una vez concluido el rescate extrae el carbón para su autoabastecimiento”.
Como segundo punto, informó la secretaria de Trabajo, se entregará a la Comisión Federal de Electricidad toda la documentación de los estudios técnicos relacionados con la mina Pasta de Conchos para que la CFE inicie de inmediato con los trabajos de ingeniería de detalle correspondientes.
Asimismo, se contempla el pago de indemnización para cada uno de los 65 núcleos familiares, se realizará a través de la Secretaría de Gobernación a más tardar el 31 de diciembre de 2020, previo acuerdo de las víctimas.
Otro de los acuerdos es que las obras públicas previstas en la reparación integral de tipo colectiva iniciarán en enero 2021, y estarán a cargo de la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano; en homenaje a las víctimas se construirá un memorial en una parte del predio de la mina de Pasta de Conchos, a cargo de la misma dependencia.
La Secretaría de Gobernación dará inicio con el proceso de negociación de un acuerdo de solución amistosa en el cual se plasmarán los detalles de la reparación integral antes señalados y previstos. El presidente de la República asistirá a Nueva Rosita Coahuila el 23 de octubre de 2020 a supervisar los avances del cumplimiento descrito en los puntos de acuerdo.
Fuente: El Economista