“…Se hacen eternas cuando las quieren y siempre viven y nunca mueren. Cuando duermen son indefensas y se despiertan cuando las piensas. Y las atacan y las defienden, las más valiosas nunca se venden. Alcanzan todo lo que desean, así de grandes son las ideas”
Calle 13 (fragmento Así de grandes son las ideas).
La semana pasada nuestro movimiento sufrió una gran pérdida, el día miércoles 16 de septiembre del 2020 se fue nuestro compañero Juan José Gómez Santos, originario de Sinaloa. Viajero incansable, estudió en la Normal de maestros en Nayarit y se formó en el proceso social con Alejandro Gascón Mercado. Fue, un luchador social incansable, fundador del PRS Nayarita, militante del PSUM, dirigente de la UGOCEP. Además, fue fundador del PRD y acompañante solidario en el proceso de morena, impulsor convencido de la cuarta transformación, y ejemplar funcionario en el ayuntamiento de Manzanillo.
Juan José ejercía el papel de intelectual comprometido con el proceso de cambio; cada semana a través de sus artículos de opinión dio la batalla de las ideas en contra del viejo régimen, denunciaba el entramado de corrupción e intereses que hay en el estado, los personajes oscuros de la clase política que conspiran y confabulan todos los días para tratar de frenar la cuarta transformación.
Juanjo señaló claramente a los actores que traicionando el voto del pueblo en las urnas de 2018, votaron la deuda inmoral e innecesaria del mal gobierno de Ignacio Peralta. Y por si fuera poco, no perdía el rumbo pues día con día hacía un llamado constante a la unidad y al trabajo en torno a los principios del movimiento.
La última vez que lo vi fue una semana antes del proceso para iniciar la recolección de firmas para la consulta del juicio a ex presidentes: “¡compadre!” -como siempre decía al saludar- “debemos de organizarnos, el partido debe tener un papel fundamental de apoyar al presidente, de profundizar el proceso de cambio, lo están haciendo muy pocos, la mayoría están distraídos y otros están en otra dinámica muy diferente a la del presidente, pactando y negociando en vez de estar con la gente y organizarse en torno a un programa e ideología de izquierdas que el presidente comparte e impulsa todos los días en las mañaneras.”
La defensa del Ayuntamiento:
Desde hace mucho tiempo no veíamos que la figura de presidente municipal de Manzanillo fuera tan asediada, tan goleada y calumniada por los intereses económicos y políticos creados en el periodo neoliberal, además de los poderes fácticos que se dedican a tergiversar y mentir cada día para tratar de desprestigiar a una administración honesta y transparente que ha emprendido una campaña contra la corrupción que ha permitido que las finanzas de Manzanillo sean las mejores del estado, poniendo el ejemplo de cómo debe ser una administración de la cuarta transformación.
A la defensa del proyecto de transformación en Manzanillo Juan José dedicó muchas de sus columnas, enfrentando el ataque, las fake news y la desinformación. Nuestro compadre siempre estaba ahí con su pluma valiente en ese Viaje de las ideas que tienen fuerza, para permanecer, para luchar, para resistir y para transformar. Señaló la simulación y la doble moral de los representantes del viejo régimen que ahora que vieron afectados sus intereses, de forma violenta se dedican a tratar de sabotear y detener todas las acciones emprendidas para la transformación desde el ayuntamiento, el gobierno federal o el congreso local.
Juanjo sabía que eran los mismos intereses y personeros del viejo régimen representados en el ex gobernador Fernando Moreno Peña (padre de la impunidad y la corrupción en Colima) quienes financian y alientan las campañas de odio y desinformación contra los principales actores de la cuarta transformación en el estado, por eso juntos deberíamos enfrentarlos para lograr el objetivo más importante en la historia moderna del estado de Colima, sacar al mal gobierno del PRI en el estado que se ha aferrado al poder por más de 80 años.
Por eso le debemos a Juan José, a muchos que como él ya nos dejaron y al pueblo de Colima, el trabajo en unidad, el diálogo fraterno y la defensa de las convicciones para enfrentar a los intereses más oscuros, que todavía mal gobiernan nuestro bello estado.
