#Paguen Lo Que Deben
“En la actualidad, estamos llevando a cabo un cambio de régimen tal como se hizo cuando se
derrotó a Porfirio Díaz, pero sin violencia.”
Andrés Manuel López Obrador. Hacia una economía Moral 2019
Dicen que después de esta pandemia, el mundo ya no volverá a ser igual. Nada. las actividades no
serán como las conocíamos. Las personas deberemos aprender otros modos de convivencia,
acordes a las nuevas circunstancias. El coronavirus no solo vino a demostrarnos lo frágiles que
somos como humanidad, sino a decirnos que ya no podemos vivir al ritmo en el cual estábamos
acostumbrados. Tuvimos que parar. Parar y reflexionar. Reflexionar sobre qué hacer, como
conducirnos y hacia a donde ir. El coronavirus nos plantea la necesidad de organizarnos de otra
manera como sociedad y de otras estrategias para combatir los flagelos que vienen con la
pandemia: desempleo, inseguridad, hambre. Aunque la inseguridad, en México, es otra epidemia
distinta, anterior y dolorosa, que se ha recrudecido por las nuevas circunstancias que nos obligan a
quedarnos en casa.
Es necesario e imperante tener otra forma de relacionarnos unos con otros y es urgente reconocer
que el mundo ya no será como lo conocíamos. Debemos buscar la forma de ser autosuficientes:
económica y alimentariamente. Debemos empezar a poner atención en los productos esenciales
para la vida y fabricarlos o producirlos.
Todos tendremos que aprender otra forma de hacer las cosas. Los grandes empresarios, por
ejemplo, deberán de dejar de pedir que sus impuestos les sean perdonados. Ya se les ha
perdonado mucho. Durante muchos años, a través de sus relaciones con los gobernantes, han
pasado de largo el pago de sus impuestos y se les ha perdonado lo que no se le perdona a una
persona física, a una clase media capturada en sus empleos y con impuestos que el fisco no les
perdona. En este momento, en lugar de pagar lo que deben, quince mega empresarios en este
país han impulsado (soterradamente), una campaña en contra del presidente de la República para
no pagar lo que deben. Su deuda llega a los 50 mil millones de pesos.
Esto no puede seguir sucediendo. El país no puede estar endeudado mientras las personas y las
empresas no cumplen con su parte de la ecuación. No puede el gobierno de México pedir
prestado para rescatar a las empresas, cuando las empresas deberían solidarizarse con el gobierno y pagar su deuda ahora, que es cuando más se necesita. Como dice el presidente: no se les pide
que den caridad o que den algo extra. Solo se les pide que paguen lo que deben.
En los gobiernos anteriores, no pagar impuestos era posible. Pagar lo mínimo, también. Entre 2013
y 2018, mientras una persona física pagó 35% de sus ingresos en impuestos, las grandes empresas
apenas pagaron un 2.2%
Empresarios de todo el país han visto perdonadas sus deudas de diferentes maneras. Algunos por
las amnistías de 2007 o 2013. A otros se les perdonó la deuda por que les han condonado multas o
recargos, o porque se encuentran en concurso mercantil, o les perdonaron el IVA, o porque se les
otorgó un beneficio que se llama retorno de inversiones. La cuestión es que no pagaron impuestos
más de 22 mil empresas en todo el país. En Colima, administraciones federales pasadas han
perdonado la deuda de impuestos a más de 2900 empresarios, entre los que se cuentan
instituciones de educación superior, restaurantes, compañías agrícolas, papelerías, constructoras,
municipios, hoteles y hasta exrectores. Actualmente, hasta diciembre de 2019 había 737 empresas
que deben a la hacienda pública en Colima. Ojalá y estén al corriente o pronto o hagan. Ese dinero
lo necesita el país. Lo necesitan los pobres. Lo necesitan las instituciones de salud. No pueden
llamarse desilusionados del presidente de la república por no endeudar al país para rescatarlos. El
país necesita que lo rescatemos. Cada quién haga su tarea. Es el momento de ser solidarios con los
que menos tienen. En lugar de llamar a no pagar impuestos, es mejor que paguen lo que deben.
Ese dinero puede traducirse en becas, préstamos a microempresas, apoyo a los programas del
campo, recursos para los ancianos. Tan solo con los 50 mil millones que deben las grandes
empresas, pueden otorgarse 2 millones de créditos a PYMES o puede pagarse el apoyo económico
de 833 mil sembradores del programa sembrando vida durante un año, o podrían becarse a 500
mil estudiantes o podrían otorgarse 100 mil créditos de vivienda de 500 mil pesos cada uno.
El pueblo ya los rescató muchas veces. Les toca a ustedes rescatar al pueblo.
#PaguenLoQueDeben.