«En Colima, el gobierno sigue buscando maneras de asfixiar al pueblo. El gobernador del Estado, José Ignacio Peralta Sánchez, lleva tiempo acariciando la idea de adquirir más deuda para el estado. Hoy, con el pretexto de la pandemia, busca que se le apruebe un crédito por 722 millones de pesos, aunque reconoce que la mayor parte de ese dinero estaría destinado para la construcción de un edificio de vigilancia policiaca y para remodelar Palacio de Gobierno, gastos excesivos y no esenciales para la crisis sanitaria y de seguridad», denunció la Coordinadora Socialista Revolucionaria, mediante un posicionamiento publicado este día.
La organización difundió en documento en el que se pronunció contra el endeudamiento planteado por la administración estatal: «nos volvemos a pronunciar en contra de ese intento del gobierno estatal de cargar sobre las y los trabajadores de Colima las prioridades de los de arriba, pues estos créditos millonarios siempre se le cobran al pueblo con mayores impuestos».
«¿Por qué seguir castigando nuestros salarios para financiar una estrategia de seguridad que ha demostrado ser un fracaso y una remodelación para oficinas de un gobierno que no da resultados?», refirió.
Además, dijo en el comunicado, «el nuevo intento de adquirir deuda se da en un contexto cercano a las campañas electorales del próximo año, en las que el partido político del Gobernador sabe que es rechazado por la mayoría de las y los colimenses y está buscando dinero para financiar campañas y comprar votos».
«Los grupos de poder del régimen están haciendo todo lo posible para que la deuda sea aprobada. La madrugada del sábado, la solicitud de crédito avanzó en la Comisión de Hacienda del Congreso del Estado con la anuencia de dos diputados de Morena, que se aliaron con el PRI. Se espera que en los primeros días de la próxima semana la propuesta de deuda pase a votación al pleno del Congreso».
Como CSR, continúa el posicionamiento, «nos oponemos totalmente a este intento de hacer pagar al pueblo la crisis que quienes tienen el poder y el dinero han provocado. Si realmente se necesitan recursos para salud y seguridad, que se incrementen los impuestos a las grandes corporaciones como el consorcio Peña Colorada, que explota nuestras tierras casi de gratis, o los grupos empresariales Yazaki y Bodesa, que pagan sueldos de hambre a sus empleados. También se debe cobrar lo que deben a quienes saquearon las finanzas públicas, como el exgobernador Mario Anguiano».
«Exigimos a las y los diputados que voten en contra de la deuda y llamamos a las organizaciones sociales y al pueblo colimense a movilizarnos hacia la sesión del Congreso en la que se piensa aprobar el crédito, para hacer presente nuestro rechazo a este atentado contra la economía popular».
«¡No pagaremos su deuda! ¡Que la crisis la paguen los ricos!», remata.