Calderón y Medina Mora sabían del tráfico ilegal de armas de EU a México, revelan documentos
Documentos marcados por México y Estados Unidos como “sensibles” revelaron que el expresidente Felipe Calderón y el procurador general de la República, Eduardo Medina Mora, siempre estuvieron enterados del tráfico ilegal de armas a México procedentes de Estados Unidos.
El texto de 53 páginas del Buró de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) del Departamento de Justicia de Estados Unidos brindó detalles al gobierno de Calderón sobre el tráfico ilegal de armas entre el 1 de enero de 2007 y el 30 de junio de 2009.
De acuerdo con información de la revista Proceso, el gobierno calderonista respondió al gobierno de Estados Unidos, a través de la Secretaría Técnica del Consejo de Seguridad Nacional (STCNSN), con un documento en el que habla sobre las rutas del trasiego ilegal de armas de las que destacan 10 puntos de acceso al país como Tijuana, Mexicali, Nogales, Ciudad Juárez, Nuevo Laredo, Reynosa, Matamoros, Ciudad Cuauhtémoc, Unión Juárez y Ciudad Hidalgo.
El reporte también especifica la cantidad y tipo de armas que fueron confiscadas entre diciembre de 2006 y abril de 2008, donde destaca la cantidad de más de 1 millón de municiones obtenidas.
Enterados del gran número de armas que cruzaban ilegalmente el país, el gobierno estadounidense creó la “Operación Gunrunner” para presuntamente detener el trasiego. Consistió en que el ATF supervisara y autorizara la compra de armas a ciudadanos y residentes norteamericanos sin antecedentes penales para detectar su venta en el mercado negro.
MEDINA MORA TAMBIÉN CONOCÍA EL TEMA
La revista especifica que de acuerdo a documentos de los que tiene copia, durante el primer año del sexenio de Calderón, el entonces procurador general, Eduardo Medina Mora, fue notificado sobre la operación “Gunrunner”.
Los textos de Estados Unidos especifican que de las armas recuperadas en México se ubicó a la armería, al comprador, su género, raza, edad y lugar de residencia.
Como consecuencia de “Gunrunner”, el Departamento de Justicia de Estados Unidos creó otra operación, ahora llamada “Wide Receiver” o “Receptor Abierto” en español, el cual también pretendía contener el tráfico ilegal de armas. Esta acción también fue notificada al gobierno mexicano a través de la Procuraduría General de la República (PGR) encabezada por Medina Mora.
El expediente del Buró de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos especificó que entre 2006 y 2008 recuperaron 14 mil 438 armas y 31 dispositivos de ataque, mientras que la Secretaría Técnica del Consejo de Seguridad Nacional reportó que en esos años recuperaron 14 mil 135 armas y 863 granadas de fragmentación.
También informó al gobierno de Estados Unidos sobre algunos eventos en los que lograron confiscar armas traficadas a México.