El día 30 de abril, día del niño, la Cámara de Diputados se realizó la sesión donde la Cámara, en su calidad de Jurado de Procedencia, aprobó el desafuero del gobernador de Tamaulipas Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
El PRI, el PAN, el PRD, con diferentes matices, asumieron la defensa del gobernador indiciado, tal y como se esperaba, pero con 301 votos a favor y 133 en contra y 14 abstenciones se aprobó el desafuero.
El PAN dio un triste espectáculo refugiándose en la argumentación –si es que a eso se le puede llamar argumentación- patética de apelar a que se trata de una persecución política. No asumieron ninguna argumentación de tipo político seria, sólida, congruente y consistente digna de un partido político nacional que, representa cuando menos, un 14 por ciento del electorado nacional. Era lo mínimo que cualquier ciudadano esperaría de un partido político, pero nada, se dedicó ofender al titular del Ejecutivo Federal y señalar que Cabeza de Vaca era perseguido por realizar políticas distintas –y exitosas según ellos- en materia de seguridad y las relativas a las emergentes a causa de la pandemia. Su discurso lo coronaron con una manta que rezaba: ¡Basta de persecución política! ¡ALTO AL USO ELECTORAL DE LA JUSTICIA!
Sus diputados en tonos sarcásticos –aparentemente así querían serlo-, pero fallido, pretendían burlase de la mayoría para hacer válidos sus argumentos de que todo era una farsa “circo, maroma y teatro” montado por Morena.
El PRI tan solo asumió un único argumento, reiterado por todos diputados participantes de ese partido. Dicho argumento consistía en sostener que no debió aplicarse el juicio de procedencia contra García Cabeza de Vaca, pues tan solo le restan al gobernador un año y medio de gestión, y por consecuencia, debió esperarse que dicho plazo feneciera y proceder penalmente. Sostuvieron los priistas que la permanencia del gobernador al frente del gobierno estatal no dañaría en nada al erario del estado de Tamaulipas.
En el debate estuvo gravitando siempre la sombra de la diputada Maricarmen Bernal Martínez del PT.
Las fracciones parlamentarias del PT, Morena, Verde y Encuentro Social y la presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados se solidarizaron con ella. No se solidarizó Televisa ni TV Azteca. Tampoco lo hicieron las falsas feministas. Ni las Brujas del Mar ni ninguna otra organización feminista lo hizo.
Pero, por qué gravitó la figura de la diputada en toda la sesión. Maricarmen Bernal Martínez fue una protagonista involuntaria del evento, ya que, ésta fue amenazada por el gobernador Silvano Aureoles quien instruyó a su secretario particular hacerlo por vía telefónica. El gobernador amenazó a la diputada para votar contra el desafuero de Francisco García Cabeza de Vaca. En los mensajes telefónicos se le pedía a la diputada que no votará a favor de la declaración de procedencia del gobernador de Tamaulipas o que se atuviera a las consecuencias.
El PAN, el PRI, PRD y MC, en este juicio de procedencia, se convirtieron, abiertamente, en los defensores de políticos delincuentes y parte pública -y política necesariamente- del crimen organizado.
La coalición Va por México se convirtió en la coalición Va por el Crimen Organizado. Son ya, oficialmente, el brazo político del crimen organizado.
Y las amenazas de Silvano Aureoles no son una casualidad, pues éste, fue el encargado de la organización de gobernadores Federalistas, el brazo porril de la organización que, más que política, es ya una organización político-criminal. Dejaron atrás, estos partidos y los gobernadores pertenecientes a estas organizaciones, la política para expresar su identidad principal, su cara criminal.
Se dice que, probablemente, García Cabeza de Vaca ya esté en los Estados Unidos. Y aquí en México los partidos defendiendo al crimen organizado. Los partidos pareciera que su objetivo es cubrirle su huida. No está de más recordar que el todavía gobernador solo asistió e la Comisión Instructora en forma virtual y su abogado Alonso Aguilar Zinser asumió totalmente la defensa, pues él no fue capaz de articular una sola palabra. Ante el Jurado de Procedencia no se presentó, como buen cobarde, llenando con ello el perfil del delincuente perfecto.
Esa es la oposición. De ese tamaño está la decadencia de la oposición. Y todavía tienen el descaro de pedir el voto. Estos partidos deberían ser disueltos, legalmente, junto con el INE.
Silvano Aureoles es el brazo ejecutor del cártel de los Federalistas. Silvano Aureoles representa los verdaderos argumentos del Prian. Son narco-políticos.
Maricamen Bernal Martínez, sin proponérselo, se convirtió en una heroína de la gente de bien que busca la paz y el bienestar en México. Ella demostró que es una mujer que nos representa con dignidad y valentía.